martes, 21 de noviembre de 2017

El submarino argentino ARA San Juan avisó de un desperfecto antes de desaparecer

Macri junto a familiares del submarino desaparecido
El submarino argentino que desapareció en el Atlántico hace cinco días con 44 tripulantes avisó de una avería eléctrica mientras estaba de patrulla en el sur del país, por lo que se le indicó retornar a su base antes de que se cortaran las comunicaciones, dijo el lunes un oficial militar.

Gabriel Galeazzi, comandante de la Agrupación de Buques Hidrográficos de la base naval de Mar del Plata adonde pertenece el ARA San Juan, reveló que la nave había informado de un fallo. El submarino es intensamente buscado por una docena de aviones y barcos en un enorme operativo internacional. 

“El buque salió a superficie y comunicó esta avería que había tenido y por eso el comando de la fuerza de submarinos, que era su control en tierra, le dice que cambie el rumbo y que venga para Mar del Plata”, dijo Galeazzi a periodistas. 

Sin embargo, el oficial afirmó que es normal que las embarcaciones sufran averías cuando están navegando y que tras reportar el problema, el capitán se comunicó nuevamente para decir que el submarino estaba operando normalmente. 

“No podemos asociar avería con emergencia. El comandante informó en la última comunicación por satélite que venía navegando en inmersión, a 5 nudos, hacia Mar del Plata”, señaló Galeazzi.

Una fuente del Ministerio de Defensa, que habló a condición de anonimato porque no está autorizado a realizar declaraciones, dijo a Reuters que el informe que la Armada elaboró sobre la situación del submarino antes de desaparecer -conocido como radiograma- no menciona que la nave haya tenido un desperfecto. 

“Si hubo una avería, la Armada lo tendría que haber mencionado en el informe porque eso afecta el plan de búsqueda y rescate”, afirmó la fuente. 

Más temprano el lunes, un portavoz de la Armada dijo que las llamadas por satélite detectadas el sábado no provinieron de la nave, como se creía previamente. Las llamadas, de breve duración y que no lograron conectarse, habían generado esperanzas de que los tripulantes estaban vivos y tratando de hacer contacto. 

“(Se) investigaron todas las señales en el espectro de la área de operaciones”, dijo a medios Enrique Balbi, portavoz de la Armada argentina. “Si bien existieron siete intentos (de llamados) en esa frecuencia no se correlacionan, no corresponden al teléfono por satélite del submarino San Juan”. 

La compañía de comunicaciones por satélite Iridium Communications informó el domingo que la última llamada registrada desde su dispositivo en el submarino fue el miércoles 15 de noviembre, el mismo día que se perdió su rastro. 

La nave partió el lunes 13 de noviembre de Ushuaia, en el extremo austral del país sudamericano, rumbo a Mar del Plata, una ciudad costera ubicada a unos 400 kilómetros de la capital argentina. La embarcación debía llegar a su base el domingo 19 o el lunes 20.

SIN BUENAS NOTICIAS
Un persistente temporal que azota desde el fin de semana la zona donde se está desplegando la búsqueda de la nave seguía dificultando el lunes la exploración, tanto en la superficie como debajo del mar. 

“Si está en inmersión y no puede ir a superficie y no puede hacer ‘snorkel’, no puede renovar el aire del ambiente, ahí ya es el siniestro más perjudicial para el submarino”, dijo Balbi. 

El presidente Mauricio Macri se reunió el lunes con decenas de familiares de la tripulación que permanecen en la base de Mar del Plata a la espera de noticias. 

“No hay noticias buenas”, dijo a periodistas que aguardaban afuera de la base Juan Carlos Mendoza, el padre de Fernando Mendoza, un oficial del submarino. “Ojalá tenga oxígeno”, dijo. 

La hermana de Eliana María Krawczyk, la única oficial mujer a bordo del submarino, dijo a Reuters que confía en que hallarán con vida a la tripulación.
Con información de Reuters