Reuters - Las salidas de capital de Argentina se contrajeron un 68% en el segundo trimestre del año anterior debido a los controles de divisas duras, dijo el jueves, un informe del Banco Central.
Los flujos de salida fueron de US$ 1.97 mil millones en el periodo abril-junio, comparado con US$ 6,13 mil millones un año antes, cuando los argentinos estaban comprando dólares en previsión de que la moneda del peso pronto comenzaría a despreciarse a un ritmo más rápido.
Justo después de ganar una victoria aplastante reelección en octubre, la presidenta Cristina Fernández restringió las compras de divisas para frenar la fuga de capitales y proteger las reservas de divisas del banco central, que se utilizan para pagar la deuda pública.
En mayo, los controles se había endurecido en una virtual prohibición de las compras de moneda extranjera; una política que se anunció formalmente dos meses después.
Las salidas de capital casi se duplicó el año pasado, de US$ 21,5 mil millones, a US $ 11,4 mil millones en 2010.
Los controles de divisas, los bordillos nuevos de importación y las normas más estrictas para la repatriación de los ingresos de exportación tienen por objeto el mantenimiento de dólares en el país, pero muchos economistas dicen que están perjudicando a los negocios y la confianza del consumidor y el empinamiento de una desaceleración económica.
Los flujos de salida fueron de US$ 1.97 mil millones en el periodo abril-junio, comparado con US$ 6,13 mil millones un año antes, cuando los argentinos estaban comprando dólares en previsión de que la moneda del peso pronto comenzaría a despreciarse a un ritmo más rápido.
Justo después de ganar una victoria aplastante reelección en octubre, la presidenta Cristina Fernández restringió las compras de divisas para frenar la fuga de capitales y proteger las reservas de divisas del banco central, que se utilizan para pagar la deuda pública.
En mayo, los controles se había endurecido en una virtual prohibición de las compras de moneda extranjera; una política que se anunció formalmente dos meses después.
Las salidas de capital casi se duplicó el año pasado, de US$ 21,5 mil millones, a US $ 11,4 mil millones en 2010.
Los controles de divisas, los bordillos nuevos de importación y las normas más estrictas para la repatriación de los ingresos de exportación tienen por objeto el mantenimiento de dólares en el país, pero muchos economistas dicen que están perjudicando a los negocios y la confianza del consumidor y el empinamiento de una desaceleración económica.
